EL ELIXIR DE FLOR DE LUNA

 Una joven dispuesta a arriesgarlo todo para destruirlo todo. 

 El reino de Kandala está al borde del colapso. Las peleas entre los distintos sectores no han hecho más que empeorar desde que una enfermedad empezó a arrasar las tierras, y el único remedio conocido, el elixir preparado con pétalos de flor de luna, está seriamente limitado. El rey se aferra a una paz endeble con mano implacable. En la Selva, Tessa Cade, aprendiza de boticaria, y su mejor amigo Wes están cansados de ver cómo sufre la gente. Arriesgan su vida noche tras noche para robar pétalos de flor de luna y distribuir el elixir entre quienes lo necesitan, pero no es suficiente. Cuando empieza a rumorearse que el remedio ya no funciona y comienzan a alzarse voces pidiendo una revolución, una decisión especialmente cruel del justicia del rey provoca tal desesperación en Tessa que intenta lo imposible: colarse en el palacio. Pero lo que encuentra en su interior la lleva a preguntarse si acaso es posible arreglar Kandala sin destruir primero el reino por completo.

Desde hace un tiempo el Reino de Kandala está sufriendo; una misteriosa fiebre está acabando con sus habitantes y si estos no toman el remedio para curarse, acaban muriendo. El problema es que la medicina, cuyo componente principal es la flor de Luna está limitado y solo crece en unos lugares concretos, que están dentro del Sector Real, y solo unos pocos pueden permitirse acceder a la medicina. Pero el los barrios más pobres, Tessa y Wes roban pétalos de flor de luna, preparan el remedio y van entregándola casa por casa a los más necesitados, pero tienen que tener cuidado pues la patrulla nocturna se encarga de que nadie trafique con este don tan preciado. Cuando un día Wes es apresado y juzgado por el justicia del rey, Tessa cae en un pozo negro pero está decidida a acabar con el rey y su hermano, pero una vez dentro se dará cuenta de que las cosas no son como ella pensaba: el sector también está sufriendo y puede que ella sea la solución.

Conocí el libro cuando la editorial anunció su publicación y automáticamente supe que tuve que leerlo, pues ya había leído otros libros de la autora y había acabado encantada; este no iba a ser menos. 

El elixir de flor de luna está narrado en primera persona siguiendo la perspectiva de Tessa y de Corrick, el hermano del rey; a lo largo de los capítulos conoceremos cómo es la vida cada uno desde diferentes lugares: Tessa en los barrios pobres y Corrick en el Sector Real. Conforme avanzamos en la historia veremos que las cosas van cambiando, se van descubriendo secretos muy bien guardados y nuestra protagonista aprenden los secretos de la realeza. El libro está compuesto por cuarenta y cinco capítulos y 473 páginas. Los capítulos no son muy largos, tiene una extensión normalita, aunque podremos encontrarnos con algunos más largos o cortos. 

La historia me ha gustado muchísimo, al principio me estaba gustando pero tampoco me estaba diciendo mucho, pero es algo normal en el inicio de cualquier libro; una vez pasadas las 100 páginas no pude dejar de leer y estaba totalmente atrapada. Y es que la pluma da Brigid Kemmerer me parece una absoluta maravilla, parece que todo lo hace fácil, lo que provoca que cuando estás leyendo todo sea ágil y fluido. 

Tal y como he dicho antes, es el tercer libro que leo de la autora: el primer fue Cartas a los perdidos una historia romántica muy bonita pero la editorial que la publicó nunca trajo la segunda parte. El segundo fue Una maldición oscura y solitaria libro que me disfruté mucho pero que aún no he leído el segundo, a pesar de tener la trilogía completa. Y el último este y sigo encantada con ella. Creo que leeré todos los libros que se publiquen de ella. 

Los personajes me ha gustado bastante. Tessa es valiente y decidida, pero al mismo tiempo un poco inocente cuando llega al Sector Real. Corrick por su parte tiene dos caras: la primera para cónsules y la Corte, pues debe actuar como el justicia del rey; la segunda es la que le muestra a su hermano, a Tessa y a los más cercanos a él. El rey Harristan creo que es al que menos conocemos, pero lo que se muestra de él me ha gustado. Quint, el intendente de palacio y el mejor amigo de Corrick, es una autentica maravilla; es capaz de guardar secretos y está atento a todo. El cónsul Allisander Sallister es un dolor de muelas, desde el segundo uno ya se gana muestra animadversión y así durante toda la lectura. 

Es cierto que hay algunas cosas que pueden ser predecibles o fácil de imaginar, pero no impiden disfrutar de la lectura al cien por cien. 

El elixir de flor de luna ha sido una lectura que he disfrutado de principio a fin. Brigid Kemmerer está entre mis autoras favoritas. Un libro lleno de acción, secretos, aventuras y traiciones. Deseando estoy de leer el siguiente.